7 Consejos eficaces para adiestrar a tu perro

Cuando se trata de adiestrar a su perro, la clave del éxito se encuentra en seguir estos diez importantes pasos.

El adiestramiento de perros implica mucho más que enseñar a su compañero canino a sentarse, quedarse y venir. Significa enseñarle a vivir con éxito en el mundo humano. El adiestramiento ayuda a mantener la seguridad de nuestros perros, les proporciona la tan necesaria estimulación mental y les da un propósito.

¿Ha visto alguna vez la mirada de orgullo de un perro cuando realiza con éxito un truco? Las sesiones de adiestramiento divertidas también refuerzan el vínculo entre usted y su mejor amigo. El adiestramiento debe comenzar en el momento en que adopte a su perro, tanto si es un cachorro como si es un adulto. He aquí siete consejos clave para el adiestramiento que le ayudarán a criar un perro feliz y bien educado.

1. Asegúrese de que su perro está sano

Si su perro no se encuentra bien, puede afectar a su comportamiento, pero el adiestramiento no es la solución en este caso. Para mantener a su perro sano, aliméntelo con una dieta de alta calidad, proporciónele ejercicio físico y juegos con regularidad, y permítale la socialización, la estimulación mental y suficiente tiempo de descanso y tranquilidad. Haga que su perro sea revisado regularmente por un veterinario. Si notas un cambio repentino en su comportamiento, o cualquier signo de que no se siente bien, se justifica una visita al veterinario antes de implementar un programa de entrenamiento.

2. Premie a su perro por los comportamientos que le gustan

Reforzar los comportamientos espontáneos que su perro ofrece por sí mismo es probablemente el método de adiestramiento más fácil y, sin embargo, el más ignorado. A lo largo del día, cuando su perro haga algo que le guste, elógielo y recompénselo por ello. Por muy problemático que crea que es su perro, hay muchos momentos en los que se comporta bien. Por ejemplo, cuando por casualidad se siente o se tumbe, vaya a su cama, coja un juguete en lugar de su zapatilla, le mire para pedirle opinión o camine bien con la correa, dígale lo mucho que le gusta eso y dele una golosina. Su perro ofrecerá esos comportamientos con más frecuencia porque ha aprendido que será recompensado por ellos. Con el tiempo, sustituya gradualmente las recompensas de comida por afecto y otras cosas que le gusten a su perro, como salir a pasear o jugar a buscar.

3. Sea proactivo y prepare a su perro para el éxito

La prevención y la gestión desempeñan un papel importante en el adiestramiento. Es mucho más fácil prevenir los comportamientos no deseados y enseñar a su perro lo que le gustaría que hiciera, que intentar romper los hábitos no deseados más tarde.

Por ejemplo, si no quiere que su perro robe comida de la encimera de la cocina, no deje comida fuera o impida que tenga acceso a la encimera. Luego enséñele lo que quiere que haga en su lugar diciéndole, por ejemplo, “déjalo”. A los cachorros les encanta morder, así que si dejas tus caros zapatos italianos a su alcance, no le culpes por ser destructivo. En su lugar, guarde los zapatos y proporciónele juguetes para morder y golosinas adecuadas.

Siempre que su perro realice un comportamiento que no le guste, asegúrese de configurar el entorno de tal manera que no pueda volver a realizar este comportamiento, y luego enséñele un comportamiento sustitutivo.

4. Empiece el adiestramiento en un entorno con pocas o ninguna distracción

Empiece siempre a enseñar un nuevo comportamiento en un entorno con un mínimo de distracciones, como el salón de su casa. Una vez que su perro haya aprendido a realizar un comportamiento dentro de su casa, pase gradualmente a lugares con más distracciones; por ejemplo, practique en su jardín, luego en una calle tranquila, después en un parque, luego en una calle más concurrida con gente caminando, y así sucesivamente.

Una de las quejas que escuchan todos los adiestradores es: “Mi perro se sienta en casa, pero no se sienta en ningún otro sitio. Es muy testarudo”. Hay una explicación sencilla de por qué su perro puede hacer un comportamiento en casa pero no en cualquier otro sitio: los caninos son aprendices contextuales. Esto significa que cada vez que el contexto cambia (por ejemplo, usted está en casa de otra persona), su perro lo percibe como una situación diferente, lo que significa que tiene que volver a enseñar el comportamiento desde el principio.

Este cambio de contexto puede parecer bastante sutil para los humanos. Por ejemplo, el hecho de que su perro haya aprendido a sentarse en una alfombra no significa que se sentará en un suelo de baldosas. O, si su perro se sienta para usted mientras está de pie frente a él, puede que no se siente cuando se lo pida desde una silla. Hay que enseñar cada comportamiento en diferentes entornos y situaciones. Pero no se preocupe: con la práctica, su perro acabará entendiendo que “sentarse” significa “sentarse” independientemente de dónde esté o de lo que ocurra a su alrededor. En ese momento, tu perro ha generalizado el comportamiento.

5. Utilice recompensas de alto valor

Debe utilizar recompensas que su perro encuentre altamente motivadoras. La mayoría de los perros están motivados por la comida y la carne o el queso reales son grandes recompensas para ellos. Algunos prefieren los juguetes o el afecto a la comida. Utilice lo que motive a su perro. Recompénsele generosamente cada vez que le enseñe un nuevo comportamiento, uno que le resulte especialmente difícil o cuando trabaje con él cuando haya distracciones. Un simple “buena chica” o “buen chico” no puede competir con una ardilla corriendo. Tendrá que ofrecerle algo más, como un filete, una hamburguesa y cosas similares. Con el tiempo, vaya despojando a su perro de las golosinas y sustituya la comida por recompensas de la vida real, como el afecto o el juego.

Un simple “buena chica” o “buen chico” no puede competir con una ardilla corriendo.

6. Haga que las sesiones de adiestramiento sean cortas y divertidas

Muchas sesiones cortas de adiestramiento a lo largo del día son más eficaces que una o dos sesiones largas. Una sesión puede durar desde unos segundos hasta unos minutos. Puede incorporar fácilmente el adiestramiento a su rutina diaria. Por ejemplo, pida a su perro que “venga” y “se siente” antes de poner el cuenco de la comida. Pídale que se tumbe antes de lanzar la pelota. Si está enseñando un nuevo comportamiento, practique durante unos minutos y termine siempre con una buena nota El adiestramiento no debe ser una tarea tediosa. Debe ser divertido para usted y para su perro. Ya sea que le enseñes a “quedarse” o a “sacudirse”, todo son trucos para tu perro.

7. Sea coherente

A menudo enseñamos involuntariamente a nuestros perros comportamientos no deseados. Por ejemplo, a algunas personas no les importa que sus perros salten sobre ellas, a menos que lleven ropa bonita. Pues bien, nuestros perros no ven la diferencia entre nuestros vaqueros informales y un vestido de cóctel. Además, todos los miembros de la familia tienen que ser coherentes con sus objetivos de adiestramiento. Sería difícil que su perro entendiera que puede saltar sobre una persona de la casa, pero no sobre otra. Utilice señales manuales y verbales claras y coherentes. Por ejemplo, diga “siéntate” en lugar de “siéntate” si quiere que su perro se siente. Diga “fuera” y no “abajo” cuando quiera que su perro se baje del sofá. Nuestros perros nos prestan mucha atención y un pequeño cambio en nuestras palabras o gestos puede confundirlos.